En el marco de la celebración de Semana Santa donde se registra un aumento en el consumo de pescado y productos derivados, la Secretaría de Servicios Públicos a través de Departamento de Bromatología e Higiene (ASSAL) quiere hacer llegar a la población recomendaciones útiles para el consumo seguro de pescado con el objetivo de generar un aporte a la salud pública.
· Adquirir pescados y alimentos derivados en negocios o establecimientos habilitados y que se encuentren en buenas condiciones de higiene.
· Corroborar que los pescados frescos mantengan la cadena de frío en heladeras o recipientes con hielo, y que no estén expuestos al sol o al aire libre.
· Si adquiere pescados congelados, controle que se encuentren correctamente envasados y totalmente rígidos. Una vez descongelados, deben consumirse y no volver a congelarse.
· Verificar la existencia de rótulos en los productos procesados; en el caso de enlatados, estos no deben estar abollados, oxidados e hinchados.
· Separar los pescados y mariscos crudos de aquellos productos listos para consumir mientras se realiza la compra, en la heladera y durante la elaboración de los alimentos en el hogar.
· Si va se va consumir empanadas ya cocidas, verificar que las mismas estén conservadas en refrigeración. Al momento de consumirlas, calentarlas completamente.
· Cocinar completamente los alimentos que va a consumir.
En ninguna circunstancia debemos consumir pescado cuando tenga:
· Consistencia blanda y floja. Una forma de comprobar esto es hacer presión con los dedos y ver si las marcas persisten.
· Pérdida del brillo metálico de la piel
· Los ojos hundidos.
· Las branquias color gris y negro verdoso.
· Olores extraños o anormales.