En diálogo con la CSC Radio, Dándolo sostuvo que se vive la situación climática “con mucha preocupación” porque “por lo que se ve a través de las redes sociales los productores nos informan y más allá de que ceso el alerta meteorológico y se espera que empiece a componer ha llovido mucho especialmente en el centro sur del Departamento y muchos cultivos de trigo que ya estaban para cosecharse están con agua dentro de los lotes”.
“Esperamos una evaluación en los próximos días y que esto no haya afectado y sea un nuevo golpe para la producción”, deseó el dirigente, quien explicitó que “lo que se había cosechado era un porcentaje muy bajo, con vísperas de buenos rindes, pero el grueso de la cosecha estaba para comenzar en los próximos días y esperamos que no termine afectando por esto, que por suerte fue solamente abundante agua”.
No obstante, mencionó que “en Progreso hubo un fuerte viento, el mayor daño fue en el casco urbano y no hay comentarios de que los productores hayan tenido problemas y por eso estamos con todas las expectativas de que mejor rápidamente y se pueda comenzar a cosechar lo antes posible el trigo que todavía está en el campo.
Lamentó que “se volvió a repetir, sobretodo en productores de Esperanza, San Agustín, Franck, Progreso, que el temporal afectó el tema camino y la falta de energía eléctrica, con tambos que estuvieron sin luz por más de 24 horas y tuvieron que poner en marcha sus propios equipos”. Al respecto, dijo que “pasa el tiempo y el problema de los caminos se sigue repitiendo”.
Ante ello, advirtió que “el cambio climático vino para quedarse y hay que rever nuevas estrategias porque el riesgo es muy grande y la inversión muy alta para costear al productor que le tocó quedarse sin la cosecha por un evento climático y es muy difícil que se pueda reponer en el contexto que estamos viviendo hoy”.
“Hay zonas donde gran porcentaje del agua terminó en el Arroyo Cululú o el río Salado y quizás más adelante vamos a necesitar esa agua porque nos va a faltar para los cultivos, entonces hay que ir pensando cómo retener esa agua para poder reutilizarla en los momentos de necesidad y contrarrestar alguna sequía. Parece una idea muy loca teniendo en cuenta que en este momento en vez de darle al campo para que invierta en estas cosas se le imponen retenciones, pero son las discusiones que tenemos que dar a futuro si queremos cambiar este contexto por el que estamos atravesando”, ejemplificó.
Consultado sobre el arroyo Cululú y la preocupación por la obra de canalización que encararía la provincia en la zona, Dándolo sostuvo que “se sabrá en las próximas horas” cuál es la situación aunque aclaró que “hacia el oeste no hubo grandes lluvias en zonas que vuelcan para el departamento Las Colonias y la lluvia es más local; así que se va a poder medir qué pasaría si hubiese llovido en la misma magnitud en la zona oeste”.
De todos modos, sostuvo que “sí se nota que la obra viene muy lenta y de estos eventos climáticos con abundantes lluvias nos enteramos a corto plazo y más adelante nos podemos encontrar con un problema mayor”.
Ante ello, consideró que “la provincia y la Nación deberían acelerar un poco todo este tipo de obras porque saliendo desde el centro norte del Departamento, por María Luisa o La Pelada, no se puede ir a Esperanza porque el puente nuevo de ruta 4 está cortado por obras –debe ser ya la enésima vez que lo cortan- y ahora no se puede ir por ruta 11 porque tiene agua arriba y hay muchas rutas y puentes inutilizados porque en su momento no se han hecho las obras a la atura de las circunstancias”.
“En política se apuran demasiado a sacarse la foto y a no controlar que la obra realmente se haga como corresponda. Se sigue haciendo infraestructura de la década del ´60 y se olvidan que ya estamos en el Siglo XXI”, concluyó.