Una figurita de Diego Maradona en el Mundial de España 82 se vende en eBay por 135 euros. Una caja con 100 sobres cuesta 299 euros. Y el álbum con "resultados anotados en lápiz" se puede encontrar por 150 euros. No son cifras astronómicas, pero dan buena cuenta del valor que tienen estos álbumes para coleccionistas y nostálgicos. De hecho, algunos llegan a alcanzar precios con más ceros: "El álbum más caro de la historia es, precisamente, uno de México 70 de Panini. Llevaba la firma de Pelé en la portada y se pagaron por él 12.000 euros en una subasta por Internet", explica Juan Pedro Martínez, director editorial de Panini en España.
Presencia ininterrumpida
Desde la Copa del Mundo en que la selección alemana se impuso a la holandesa, Panini ha editado la colección oficial de todos los mundiales, incluyendo la de Rusia 2018, que lleva unas semanas en el mercado. "Para el Grupo Panini es la colección de colecciones", apunta Martínez, "una colección sin igual en cuanto a ventas potenciales".
El álbum y las figuritas se venden en 120 países del mundo, siendo los mercados más destacados Europa y América del Sur.
Cómo va el campeonato
El otro factor que influye son los resultados que va obteniendo cada selección una vez que arranque la competición. Francisco López, responsable de figuritasrepes.com, una web española de intercambio de figuritas y coleccionables, comenta que "habrá actividad todo el verano, al menos mientras juegue España", explica. Y si la selección consigue un buen resultado, se notará aún más: "Si ganase, muchos se animarían a hacer la colección después del Mundial", como ha pasado otras veces que el equipo ha ganado torneos.
Sin edad
¿Quiénes son los coleccionistas de las figuritas del Mundial? Torrent, de Panini, apunta que no tienen datos del perfil clásico del coleccionista de figuritas, "pero es evidente que son sobre todo niños y niñas. Excepto en colecciones como la del Mundial, a la que se reenganchan los adultos para recordar su juventud".
Los usuarios de la web de López también son muy variados. "Hay coleccionistas serios que hacen todas las que salen al mercado y no solo las de fútbol. Y coleccionistas casuales, que aparecen a lo mejor una vez al año". Por ejemplo, "los que coleccionan los figuritas de la Liga están muy presentes en agosto y septiembre, pero en noviembre ya han desaparecido".
En cambio, las colecciones infantiles desaparecen en verano, cuando terminan las clases. Y eso también se nota en la web, ya que muchos de los usuarios son, como lo fue López, padres que están ayudando a sus hijos a terminar las colecciones. "Vienen y a lo mejor encuentran las tres figuritas que les faltaban de una colección de Mazinger Z de cuando eran niños. Eso es muy bonito, te escriben diciendo que pensaban que no iban a terminarla nunca".
Ingresos mundiales
Panini facturó 65 millones de euros en España en 2017, con unos beneficios de en torno a los cinco millones, según explica a Verne Lluís Torrent, director general de la empresa en el mercado español.
"El negocio más importante para esta compañía, que también distribuye cómics, es el de las figuritas. Los de fútbol suponen una parte "crucial, pero hemos hecho buenas ventas de colecciones de Disney, de Invizimals, de Animales, de Gorjuss, de Monster High, etcétera", explica Torres.
No hay figuritas que salgan menos que otros, como sugiere la leyenda urbana. No imprimen menos figuritas de Messi o de Ronaldo para que sean aún más codiciados que el resto.
Los matemáticos de la Universidad de Ginebra Sylvain Sardy e Yvan Velenik pusieron a prueba esto en 2010, en un estudio titulado Paninimanía: escasez de figuritas y estrategia rentable. Compraron 6000 figuritas de la colección del Mundial de Sudáfrica y cada una salió con la frecuencia prevista.
