El sector de la docencia universitaria enrolada en la Conadu Histórica —que a través de su gremio Adul, tiene amplia representación en la UNL— endureció su plan de lucha. En el último congreso de esa federación nacional, se resolvieron dos nuevos paros: uno de 48 horas esta semana (el jueves 15 y viernes 16), y otro de 72 horas la semana próxima, el martes 20, miércoles 21 y jueves 22.
La medida se da en el marco de un sostenido reclamo al Ministerio de Educación nacional y los rectores para la “urgente reapertura” de la mesa de negociación salarial del sector. Conadu Histórica viene haciendo huelgas desde marzo, cuando comenzó a reclamar por paritarias para el sector.
Además, dentro del plan de lucha habrá otras actividades de protesta, y una “marcha educativa” en Buenos Aires, de la cual participarán diversos sectores gremiales en reclamo de más presupuesto para la educación pública y mejores condiciones de trabajo, entre otros puntos. La movilización será el jueves 22.
“Todavía no hay ningún llamado de paritarias de parte del Gobierno nacional. Los universitarios estamos con el mismo salario de enero, y pasaron muchas cosas como la devaluación del peso y otros desajustes económicos. La inflación le comió el bolsillo al docente universitario, y hay mucho malestar. Por eso la federación nacional (Conadu Histórica) decidió endurecer su plan de lucha, y nosotros acompañamos”, declaró a El Litoral Mariana Carminatti, secretaria general de Adul.
En lo que va del año, las huelgas nacionales de la “Histórica” ya fueron siete: el 5 de marzo, el 27 y 28 de ese mes; luego el 8 y 9 y el 22 y 23 de abril. Ahora en mayo habrá dos más, una de 48 horas y otra de 72: en total, habrá hecho 12 días de huelga. Aún no hay respuesta desde Nación, a través de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) ni del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que agrupa a rectores de universidades públicas del país.
Aval al convenio
Pero hubo una buena noticia pese al contexto de medidas extremas: Conadu Histórica avaló, al igual que otras federaciones nacionales, el nuevo Convenio Colectivo de Trabajo (CCT), único y obligatorio para todas las universidades públicas, que garantiza más derechos a la docencia del sistema de educación superior.
“La federación planteó algunas observaciones sobre el articulado del convenio. Pero lo avalamos porque entendemos que es un paso adelante fundamental, después de largos años de lucha gremial. Esto garantiza un piso de derechos para los universitarios”, enfatizó Carminatti. Ahora, alcanzado el consenso entre rectores y gremios, el Ministerio de Trabajo de la Nación deberá homologar el CCT, y finalmente Presidencia lo autorizará por decreto.
El Litoral