La fecha no es casual. El llamado “Dantedì” coincide con el día en que los estudiosos del escritor italiano sitúan el inicio de su viaje en su gran obra, la Comedia, conocida popularmente como La Divina Comedia, tal como la bautizó poco tiempo después otro grande de las letras italianas, Giovanni Boccaccio.
En adhesión al “Dantedì”, la Asociación Dante Alighieri de Esperanza comparte una reflexión sobre La Divina Comedia realizada por María Mercedes S. de Balangione (exdocente Escuela de Lengua y Cultura italianas Dante Alighieri).
Dante, no atado a las leyes del Tiempo
Si bien Dante escribió obras en latín, lengua usada por los estudiosos de su época, al escribir su obra Magna, la Divina Comedia, se inclinó por algo más legible y de común acceso, ya que fue un gran defensor de la unidad italiana. Como buen político entendió que todos debían utilizar una lengua que los uniese, y así usó el volgare, influyendo a tal punto en la evolución del futuro idioma italiano que autores de su época, como Petrarca y Boccaccio, usaron esta lengua. Inclusive Macchiavello acompañó de igual forma las bases del italiano actual.
En homenaje a ello, el 25 de marzo de cada año se celebra el Dantedì, en recuerdo al Supremo Poeta de Italia, y se la denominó Giornata Dantedì. Esta fecha fue justamente elegida por los académicos como la del inicio del viaje de Dante al Más Allá en la Divina Comedia, considerada obra maestra de la literatura italiana y universal.
Rememorando al gran florentino ya sea en sus escritos e interpretaciones como en su influencia intelectual, nos muestran a un Dante muy humano, pero a la vez no atado a las leyes de su tiempo. Poetas, filósofos y políticos se han referido a la Divina Comedia como una obra atemporal. Así, el místico Theilhard de Chardin la llamo “una realidad sin distancias”; el gran Unamuno decía “Dante nos introduce a través de sus maravillosos tercetos en los momentos más sublimes de nuestra existencia humana, sin fecha alguna”; Umberto Eco apuntaba que “La Divina Comedia nos supera y nos abraza, en ese transcurrir de los tiempos, donde la existencia humana traspasa las paredes de la atemporalidad.”
Y así Dante, con suma autoridad sea como autor, protagonista y maestro de su propia obra, nos va relatando el actuar del ser humano y sus consecuencias. Todos somos peregrinos en este diario vivir y nos unen los lazos de la filosofía, de la religión, de la historia y de tantas otras disciplinas. Y frente al paso de los años el hombre calla, medita, reflexiona en este existir. Nos vamos acercando a las sabias sentencias de la Divina Comedia, desde aquel lejano 1300 hasta hoy siglo XXI.
Por todo ello en esta jornada de conmemoración del Dantedì recordamos al hombre – personaje - poeta - intérprete de su propia Comedia, y al ciudadano comprometido de su época, reflejado en nuestra actualidad, no olvidado en los atardeceres del tiempo.
María Mercedes S. de Balangione (exdocente de la Escuela de Lengua y Cultura italianas “Dante Alighieri”)
