El titular del Instituto de Medicina Comparada y ex titular del Icivet Litoral de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) en Esperanza, Dr. Hugo Ortega, habló de las consecuencias que dejan los recortes y ajustes del gobierno nacional en ciencia e investigación.
En diálogo con el programa De Frente (Play Televisión), Ortega sostuvo que “la motosierra no sólo está cortando los árboles grandes sino también los retoños, y recuperar lo que está pasando hoy va a llevar el tiempo que lleva crecer un árbol, van a pasar muchos años hasta que se logre recuperar el daño que se ha producido en este año y medio, con recursos humanos que han abandonado el sistema en la mitad de su formación, con equipos de trabajo en diferentes institutos que se han disuelto, con proyectos que se han caído y con falta de producción de conocimiento”.
Como ejemplos, mencionó que “un recurso humano que estuvo 10 años formándose para ser investigador asistente de Conicet se están yendo, con lo cual se perdieron 10 años de formación y recuperarlo implica formar a una persona de cero; hay proyectos que estaban en estadios avanzados se detuvieron y no se pueden reanudar”.
Pese a todo esto, valoró que “gracias al esfuerzo, Argentina sigue estando en el primer nivel mundial, Conicet volvió a ser reconocido como el mejor organismo de ciencia de Latinoamérica este año por producción que lleva algunos años, con lo cual lo que está pasando ahora se va a ver en dos o tres años”.
En ese marco, planteó además que “en el último año y medio hubo una pérdida del 40% del valor real de los salarios, tanto de los universitarios como del Conicet” y acotó que para la investigación “hubo un financiamiento limitado desde la Universidad, hubo financiamiento de la provincia en líneas de investigación aplicada, pero todo lo que es nacional que era el más grande, se desmanteló”.
Ejemplificó que “la Agencia Nacional de Promoción Científica no tuvo una sola reunión de directorio en un año y medio, aunque tiene un director al que le siguen pagando el sueldo, aunque no se ha cumplido ninguno de los compromisos asumidos que son proyectos, que habían sido sometidos a evaluaciones internacionales, que tenían dictamen de aprobación y con becarios incorporados”.
Puntualizó que la comunidad científica de Esperanza está integrada por el Icivet Litoral que tiene unos 40 investigadores y otro tanto de becarios, alrededor de 60 personas que también son docentes de la Universidad, y el ICI Agro tiene entre 20 y 30 investigadores. “Todos trabajan en temas prioritarios, porque se trabaja sobre cadena agroalimentaria, generando soluciones para los productores, estando en el campo. Muchas líneas de investigación subsisten hoy por el apoyo de laboratorios privados o de campos donde se hacen los muestreos y cubren los viáticos para ir a campo”, mencionó.
Aseguró que “dentro de la mala situación, el Centro de Medicina Comparada genera sus fondos y permite mantener algunas líneas de investigación, pero lo que antes era crecer, comprar equipamiento y demás, hoy es mantener recursos humanos y arreglar equipos en lo mínimo que se requiere”.
Por último, confirmó que “llegó equipamiento de un proyecto de líneas estratégicas de la provincia de Santa Fe de 2023 para consolidar una plataforma que ya estaba en marcha en Esperanza para desarrollo y evaluación de quimioterápicos, más que nada oncología de precisión. También ingresaron pedidos para trabajar en enfermedades metabólicas, se está trabajando en enfermedades reproductivas desde hace muchos años; hay ecología de enfermedades, análisis de alimentos y trazabilidad. La mayoría de las líneas son muy aplicadas”.