Fue esta madrugada en la zona suroeste de Esperanza. Agentes municipales detectaron el hecho y realizaron la denuncia pública además de iniciar el operativo de limpieza.
Los que lo hicieron parecen que cuidan a la gente pero su verdadera personalidad desvela un odio social sin límite que supera la irresponsabilidad y la "viveza criolla". Son personas que deben ser castigadas con el mayor rigor de la ley.
El canal pluvial de calle Janssen casi 27 de Febrero amaneció hoy tapado de bolsas negras repletas de pañales y residuos patológicos. Una nueva irresponsabilidad que habla de desidia para con la sociedad.
Se radicó la denuncia policial y se esperan novedades que superen el repudio de la sociedad hacia este tipo de hechos.
Es necesario tambien ratificar, modificar y atender reglamentaciones que castiguen con dureza este tipo de acciones. Los empleados municipales que esta mañana debieron regresar al canal pluvial a limpiar lo que otros irresponsables tiraron, seguramente dejaron de atender otra urgencia de atención por la emergencia hídrica o la reparación de un camino rural para que los pibes vuelvan a clases.
Esa es la realidad de una sociedad que no cuida los espacios públicos y donde no sólo falla la educación, también falla la autoridad que debe castigar el incumplimiento de la ley.
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