En el lugar donde se produjo el violento tiroteo que terminó con un vecino de Santo Tomé gravemente herido, este lunes se realizó un operativo que terminó con el derribo de ocho viviendas precarias que se encontraban en el lugar y habrían sido habitadas por personajes de mal vivir.
El operativo lo realizaron cuadrillas de trabajadores municipales acompañados por un amplio despliegue de tropas especiales de la Policía de la Provincia de Santa Fe.
La actividad estaría relacionada con derivaciones judiciales tras la detención de tres hombres y las investigaciones realizadas en el lugar.
En el lugar se encuentran viviendo otro importante numero de familias que se encuentran censadas por el municipio, que son empleados o realizan changas y con niños escolarizados y con ayuda estatal.
El operativo se realizó en un sector determinado del asentamiento con la intención de evitar que se propague como "aguantadero".
