En diálogo con la CSC Radio, Correa consideró que “uno de los datos que fue importante en los últimos días fue el anuncio de inflación que fue la tasa más baja de los últimos tres años, llegó al 3,5%, y se logra el objetivo de sostener esa tendencia que el aumento generalizado de los precios de la economía vayan en descenso”.
“A su vez, se van acomodando las cuestiones cambiarias, hoy el dólar oficial está en 1.000 pesos y la brecha prácticamente no llega al 20% con el resto de los dólares financiero y libre, y eso haría pensar que, independientemente de que en las formas se establezca o no la eliminación del cepo, si todo confluye hacia los 1.100 o 1.150 pesos, va a ir perdiendo sentido el tener toda esta telaraña de tipos de dólar que confunden, que generan incertidumbre y distorsiones en un montón de precios. Lo mismo con el impuesto PAIS que se redujo en septiembre y se elimina definitivamente en diciembre. Todo hace pensar que vamos a entrar en 2025 con algunas cuestiones más normales o racionales”, evaluó.
En este marco, consideró que “son las condiciones mínimas para después poder consolidar un proceso de crecimiento: una estabilidad en inflación, en el mercado cambiario y la baja de algunos aranceles, y para que el salario comience a ganar poder adquisitivo”.
Advirtió de todos modos: “Que los precios relativos sean más parecidos a lo que podría considerarse razonable, es la pata que falta para lograr una recuperación económica y a partir de ahí también, que comience a crecer el empleo formal, que está absolutamente estancado desde 2013”.
Finalmente consideró que “a partir de una situación más normal que debemos tener como país, inflación normal, un mercado de cambio más normal, y con todo esto estable darle la oportunidad al que quiere trabajar. No quiero nada del gobierno, no quiero un ATP un Repro, nada de eso que después se termina pagando muy caro, quiero simplemente que, al menos, nos saque la pata de arriba de la cabeza”.