En diálogo con la CSC Radio, Marenghi explicó que se trata de “la segunda jornada de recepción de envases vacíos de fitosanitarios, que se hará el miércoles 2 de octubre en el predio de Sociedad Rural en el acceso oeste de la ciudad sobre ruta 70”.
Recordó que “en junio ya se hizo una primera actividad también con Sociedad Rural y Campo Limpio donde se recibieron envases clase A de triple lavado o lavado a presión, pero en esta oportunidad se van a recepcionar envases tipo B, sin lavar, es decir que pueden acercar envases sucios y también los que son de cartón, de aluminizado”.
Especificó que “Campo Limpio es una asociación civil que es la única autorizada por la provincia para hacer este trabajo, y lo que hace es recibir esos envases que generan un trastorno al productor porque es una responsabilidad tenerlo en el establecimiento, y darle un certificado de trazabilidad al productor”.
Mencionó además que “en la primera jornada se recepcionaron cerca de 1500 bidones, y en esta oportunidad sabemos que es un momento crítico para el productor por la falta de lluvias y la cuestión económica, pero conocemos también la buena voluntad del productor de colaborar en estas cuestiones que ayudan”.
Apuntó que “los bidones se recepcionarán el miércoles 2 de octubre de 8 a 12, bajo un protocolo de bioseguridad, y pueden acercarse productores de Esperanza y de toda la región” y explicó que “las personas que van a manipular el material cuentan con los elementos de protección personal y por eso, esos envases se llevan para una degradación final, a una empresa del sur de la provincia. Para el caso de los bidones clase A que tienen un lavado, se pueden reutilizar y para eso entregan a una empresa cerca de Rosario donde lo que hacen es reutilizarlos para reductores de seguridad, cañerías subterráneas, fratachos, mangos, baldes de albañil y postes de alambrado donde el componente de los bidones sea una capa interior, no deben estar en contacto con las personas, animales y el ambiente”.
Por otra parte, comentó que “ya se realizaron entre cinco y seis capacitaciones sobre el manejo de este tipo de elementos, donde participaron veedores, aplicadores, productores, profesionales de ciencias agrarias, estudiantes y público en general”.
Finalmente, contó que “el tema es todo un limbo, y hoy el productor trata de tener estos bidones en un cerco que puede ser de malla cima, en un sector del campo donde no estén en contacto con los animales y las personas, hasta poder generarse estos ámbitos donde pueden canjearlos y Campo Limpio les entrega ese certificado de trazabilidad que los desliga de la responsabilidad penal o civil que pueda tener el productor por manipular estos bidones”.