Montalbetti contó que este año “se incorporaron cuatro aulas. Dos están ocupadas por los primeros grados, la otra el área de tecnología y la restante se acondicionó para taller de lectura, producción artística, etc”.
La docente también comentó que la institución tiene “una amplia matrícula por lo cual se necesitaba el espacio, dado que este año funcionan cuatro primeros grados y cuatro segundos y se precisaba descomprimir un poco”. “Ahora el profesor de ajedrez va a tener su sala propia junto con la biblioteca, y en los días de mucho frío vamos a contar con un espacio cerrado para educación física”, detalló.
Asimismo, agregó que “hay una matrícula de entre 24 y 27 alumnos en los primeros grados, y cuando había solo tres aulas los cursos superaban los 35 chicos. En ese momento tuvimos que limitarnos y sólo inscribir a la gente del radio porque no había más espacio ni posibilidad de que ingresen más chicos”.
También destacó que “el total de alumnos en la institución es de 547 chicos; es una escuela de primera categoría que es muy grande, pero no sería bueno que crezca mucho más, porque con mayor cantidad de gente se pierde el contacto con docentes y alumnos”.
Entre las cuestiones pendientes, enumeró que “se está esperando con muchas ansias poder techar el patio oeste, lo que nos facilitaría que los chicos tengan su trabajo de integración bajo techo, poder dar clases cuando llueve, entre otras cosas”. “Mejorar la calidad de vida de los alumnos techando ese patio es indispensable”, afirmó.
“Además hay otras cuestiones menores en cuanto al gasto que implican pero que no son menos importantes como el cambio de un portón; eliminar el tapial que divide el jardín con el patio porque es una sola escuela y adecuar la cañería de gas; pintar las galerías interiores y realizar un retoque de la pintura exterior; además de los gastos mensuales como el mantenimiento de los baños”.
Contó que “la escuela se solventa con las cuotas que los papás pagan a la cooperadora y con lo recaudado en los beneficios que se realizan eventualmente” por lo cual se hace difícil el día a día. Ante ello, se solicitó al Fondo de Asistencia Educativa (FAE) el aporte de ventiladores porque las aulas de la institución tienen aparatos muy viejos o incluso algunas no los tienen, y se espera la respuesta de la entidad.
