La Nación. – La polémica en torno a la decisión del Gobierno de acudir al Fondo Monetario Internacional ( FMI ) para acallar la crisis económica atraviesa a todos los argentinos. Por eso, la Iglesia se sumó al debate.
En cuanto a la política económica actual, criticó: «Los funcionarios nos están hablando de la gradualidad, como que nos hubieran robado el término. Nosotros somos los que pedimos la gradualidad en el aumento de las tarifas , gradualidad en la inflación .de gradualidad acá no hay nada». Y enfatizó: «Hay un sufrimiento de la gente drástico y un aumento de las cosas y de la inflación drásticos».
Si bien rescató el buen trato con los funcionarios, este hombre -que también es obispo de Lomas de Zamora- dijo que el Gobierno descuida a los sectores más carenciados. Y se lamentó al decir: «Hay un diálogo, buenos modales y buena conversación pero no hay hechos realmente visibles que ayuden justamente a los sectores menos protegidos que son los más pobres, que son los que están bajo el índice de pobreza, incluso los que están en el índice de indigencia».