A punto de cumplirse ya 57 años de un momento de gloria para el club, Almagro le ofreció un justo homenaje a quienes son gloria y leyenda para el deporte esperancino.
Los Campeones Argentinos de 1968 y que representaron a la Argentina en el Sudamericano de Clubes, en Guayaquil (Ecuador), tuvieron su merecido reconocimiento.
En la previa del partido, se realizó un acto, con descubrimiento de una placa conmemorativa, como así también de la sorpresa de una gigantografía que se apreciará siempre en el Gimnasio.
Haciendo un esfuerzo estuvieron presentes, junto a familiares de quienes ya no están entre nosotros, pero se los recordará para siempre.
