Lo sucedido en el final del partido fue lamentable y está relacionado más a una crónica policial que deportiva. La violencia e invasión al campo de juego de las dos parcialidades deberá ser sancionada por el Tribunal de Disciplina y la justicia provincial ya que actuó la fuerza de seguridad.
Todo ocurrió cuando el partido había terminado. Central San Carlos ganó en Esperanza y se clasificó para cuartos de final.
Pero el partido propiamente dicho que es lo que más importa, había comenzado con un poco mejor Central con buen trato de pelota sobre todo el Ronald Garutti y Martín Obando manejaban la mitad. Unión lo emparejo con mucho garra y con grandes corridas del defensor central Maxi López. También la dupla del medio Cristián Invinkelried y Joaquín Lezcano cortaban y jugaban, pero los repolleros no tenían situaciones claras.
Central a los 35 corta una jugaba en la mitad de la cancha y la defensa queda mal parada, atacan cuatro de los “sabaleros” se la lleva Obando se la abre a Ronal Garutti, Maxi López lo traba pero la pelota le queda otra vez a Garutti y tras la salida de Valenzuela se la pica y marca el gol “rojinegro”.
Así se terminaba la primera mitad y en el complemento de movida otra vez gran jugada por izquierda de Ronald Garutti que la rompió, tira el centro, nadie la puede sacar y el goleador Leandro Lovato la empuja al gol, 2 a 0 y un balde de agua fría para los “repolleros”.
El técnico repollero mete mano y manda a la cancha a Fede López la figura del “verde” que estaba con una contractura en la pierna izquierda y Unión salió a vender caro su derrota. Y consigue el descuento tras un centro que la despejan del área, Joaquín Lezcano tira otro centro “polli” Bologna la para de pecho y remata, nada que hacer para el golero Nico Berutti.
Luego de ahí los “verdes” buscaron el empate pero no tenían situaciones claras, Martín Obando se hizo cargo del conjunto “rojinegro” y fue una de las figuras, manejo los tiempos y tuvo algunas chances de aumentar el marcador.
Así se fue el juego dejando a Central San Carlos en cuartos de final de la Liga Esperancina de Fútbol, al final del juego fue un verdadero bochorno.
Las figuras fueron Ronald Garutti y Martín Obando que la dejaron “chiquita”.
