Este miércoles una fiscal imputó a los efectivos policiales que fueron detenidos por su desempeño en un control caminero de la ruta nacional 11 a la altura de Videla.

(Aire de Santa Fe) - Los tres policías que prestan servicios en la Agencia Provincial de Seguridad Vial y que fueron detenidos el martes en el marco de una investigación penal llevada a cabo en Asuntos Internos, fueron formalmente imputados este miércoles en los tribunales de Santa Fe. Si bien la causa la tramitan los fiscales de Delitos Complejos, Mariela Jiménez y Ezequiel Hernández, la imputación estuvo a cargo de la fiscal Laura Urquiza la cual le atribuyó a los agentes el delito de “coautores de exacciones ilegales agravadas y violación de medios de prueba en concurso real”.

La imputación tuvo lugar en la Sala 7 del subsuelo de tribunales y se dio ante el flamante juez penal, Leandro Lazzarini -exfiscal de Delitos Complejos- y ante la defensa de los acusados, a cargo del penalista Germán Corazza. El próximo viernes, en horario a definir por la Oficina de Gestión Judicial, las partes debatirán el rumbo de la causa cuando se defina si los acusados permanecen detenidos bajo la medida cautelar de prisión preventiva o transitan el proceso que los tiene en el banquillo con medidas alternativas a la cárcel.

El Subsecretario de Control de las Fuerzas de Seguridad, Ricardo Giusepponi, brindó una conferencia de prensa en la que dio detalles de la causa

Los acusados, identificados como Danilo E., Aníbal P. y Pablo Javier R., fueron detenidos por agentes de la Secretaría de Control de la Fuerza luego de que la víctima del caso denunció que una turbia situación que le tocó vivir en el control caminero de la ruta nacional 11, a la altura de Videla, en el departamento San Justo.

Dicha situación ocurrió el lunes pasado cerca de las 1 de la madrugada en el kilómetro 542 del corredor nacional. Allí, dos agentes detuvieron la marcha de un vehículo Ford Explorer en el cual iba un hombre con su esposa, su madre y dos hijos menores de edad. Tras requerirle la documentación habitual, los policías detectaron que el conductor circulaba con la Revisión Técnica Obligatoria vencida y sin cobertura de seguro. Además, en otra parte del automóvil hallaron “una iguana congelada”.

Los suboficiales le indicaron que iban a confeccionar el acta de infracción y según la hipótesis de la Fiscalía, le comentaron al conductor que iban a secuestrar el vehículo pero que ello no sucedería ya que la situación “se podía arreglar de otra forma” si abonaba una suma de nueve mil pesos para poder circular nuevamente. El conductor le entregó la suma y continuó su viaje. Sin embargo, el caso no quedó impune.

El conductor del  Ford Explorer acudió a la Secretaría de Control y denunció la coima que tuvo que abonar para que el acta de infracción no sea confeccionada. Como prueba, aportó un audio que reveló cómo fue el momento los funcionarios le indicaron que tenía que hacer para lograr salir airoso del control vehicular.